Sentir que te caes a un pozo oscuro, que vas cayendo y que parezca que no llegas nunca al fondo. Y cuando caes ... ¡Plaft! Miras para arriba, y ves que es imposible llegar al borde y poder salir de ahi. Van pasando las horas y hasta los días, sin nadie que te rescate, sin nadie que hasta que aparezca a ver como está.
Llega la desolación, te sientes sola, sin algo cálido a que abrazarte o con que taparte. Sin poder gritar, estás sin voz, difónica.
Lo único que tienes en un móvil, y le queda una raya. Una mísera raya que si te llaman, se apaga. Empieza a llover, y entra la lluvia, te empapas y te vas muriendo de frío poco a poco. Hablas y se te a aclarado la voz, gritas:
-¡ Socorro, que alguien me salve, por favor ! Por favor ... que me salve alguien.
Por suerte alguien pasa, y te escucha, se asoma y te alumbra. Te tapas la cara por el resplandor de la luz. Ese alguien es un guardia local, que por suerte llama a una casa cercana. Van es busca de tu ayuda y consiguen sacarte. Cuando sales, lloras, rompes a llorar, y lloran contigo. Te abrazan y te sorprendes, no pensabas que lo fueran a hacer. No sabias que importaras tanto en ese instante. Sobre todo con tus amigos, que lloran por ti. Al final te acaban rescatando y tienes esperanzas. Después de días en una oscuridad, sientes como morias enterrado vivo.
"Die, buried alive."
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